El intercooler tiene la misma función que un radiador de agua, pero en vez de bajar la temperatura del agua de refrigeración del motor,  el intercooler hace reducir la temperatura del aire de admisión, que suele ser elevada al pasar por la turbina (El aire se calienta al pasar por el compresor). Al reducir la temperatura aumenta la masa de aire que entra en el motor, mejorando su rendimiento (caballos de fuerza del vehículo). Existen dos tipos de intercooler: El más usado es el de tipo aire-aires (Se hace pasar una corriente de aire a temperatura ambiente a través del radiador refrigerando el aire de admisión). Este tipo puede reducir más la temperatura, siempre y cuando las condiciones sean las adecuadas. Otro tipo refrigera el aire de admisión mediante el flujo de agua de refrigeración (más pequeños, fácil de adaptar, y en los que su funcionamiento depende menos de la temperatura ambiente. El intercooler está situado bien sobre el motor (para aprovechar el aire que nos llega a través del motor), o en el frontal, junto al radiador de agua. El mantenimiento adecuado sería su limpieza interna y externa cada dos años o 40000km.